Escondido en las montañas cercanas a Donghae se encuentra el valle de Mureung que encierra varias rutas de trekking para subir a los picos cercanos y un camino más fácil, que es el que hemos hecho nosotros, para poder llegar al templo de Samhwasa y a las cascadas de Yongchuo y de Ssang.
Llegamos a Donghae en tren, desde Daegu. El trayecto es de cerca de 6 horas, por lo que tomamos el tren de las 06:15h. Un madrugón, pero la verdad es que en Corea no hemos madrugado mucho, así que no podemos quejarnos. Además, como nuestro hotel estaba al lado de una estación de metro, no tardamos nada en hacer el trayecto a la estación de tren. Tomamos el primer metro (05:41h) y en unos 20 minutos estábamos en nuestro andén. Era un tren local que hacía paradas en varias estaciones, por lo que nuestros compañeros de vagón cambiaban continuamente. Nos resultó curiosa la configuración, a la carta, de los vagones, ya que cada bloque de 2 asientos se puede poner en el sentido de la marcha o en contra. Sólo hay que pulsar una palanca del lado del pasillo y girar los asientos para que un grupo de 4 personas puedan ir hablando animadamente. Lo único que les falta poder levantar una mesita en medio para echar una partidita al julepe ;-)
Al llegar a Donghae, vimos en la parada de bus local que el que llevaba a nuestro hotel ya se había ido y no vendría otro hasta pasada 1 hora, por lo que fuimos andando. Hubiera sido agradable si no fuera porque todo el trayecto era cuesta arriba. Al día siguiente nos daríamos cuenta de que, en realidad, había otros autobuses que podían habernos dejado cerca del hotel, pero bueno, tampoco fue para tanto la caminata. Tras dejar nuestro equipaje en la habitación del hotel, nos fuimos a investigar cómo llegar al templo, a las cuevas y, sobre todo, de dónde salían y qué precio tenían los autobuses a Seúl. Dimos con la terminal de autobuses sin problemas y comprobamos que el trayecto en bus era 3.000 wong por persona más barato que el tren. Horario amplio, así que sin necesidad de reservar anticipadamente. Empezó a llover, por lo que nos tomamos la tarde de descanso, dejando el templo para el día siguiente.
Escritura en las rocas del río |
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Primera puerta de acceso al Templo Samhwasa |
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Figuras del horóscopo chino |
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Templo de Samhwasa y pagoda |
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Pabellón de la campana |
- Una gran campana, el bonsho, que se tañe con un madero oscilante junto a ella y en la que por dentro casi cabe una persona;
- Un pez de colores llamativos, de un metro o más de largo, similar a una carpa con el vientre hueco y colgado de una de las vigas que se golpea con un palo;
- Una plancha plana de metal colgando de una de las vigas y
- Un gran tambor decorado con colores muy brillantes, de la misma altura que la campaña, si no más.
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Elementos del pabellón de la campana |
- El pez para los espíritus del agua.
- La plancha de metal para los espíritus del aire.
- El tambor para los espíritus de fuego.
- La campaña para los espíritus del inframundo.
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En este templo, también unos dragones |
Buda del Templo de Samhwasa |
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Yongchuo |
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Yongchuo |

Ya al día siguiente, para terminar nuestra visita en Donghae, hemos ido a ver las cuevas. Es un recorrido sin guía, pero señalizado, por unas cuevas kársticas llenas de estalactitas y estalagmitas, adornadas no sólo con los típicos focos que aquí son de colores cambiantes, sino que también les ponen luces de neón a lo largo de los pasillos con el doble propósito de iluminar las piedras y asegurar que no te chocas con los múltiples salientes que hay en el pasillo y que son además la razón de que en la entrada te tengas que poner un casco. Muy bien por estos coreanos, porque incluso estando señalizados y llenos de advertencias, nuestros cascos se han dado un par de veces con los salientes, sobre todo en el pasaje que se denomina "el pasaje de la muerte" (lo llaman así porque está a oscuras y solo se va iluminando poco a poco según avanzas, lo que le da un ambiente más intrigante) y en el que al final de la galería ves unos restos de un esqueleto de un animal que debió perderse en este laberinto. Es un recorrido de unos 30 minutos largos que hemos tenido la suerte de hacerlos sin gente. No son las mejores cuevas que hayamos visto, pero ha sido simpático ver cómo las llenan de lucecitas de colores. Cuando llevas un tiempo en Asia, terminas viendo simpáticas las luces de colores en todas partes.
Aunque nosotros no hemos ido porque el clima no acompañaba, dicen que hay unas buenas playas de arena blanca, que se llenan en los fines de semana. De difícil acceso por lo que hemos visto, porque para llegar a ellas hay que pasar sobre las vías del tren.
Assorted Udon Hot Pot de la comida (compartido para dos) |
Puerta de la muralla de Seul |
Antigua estación central de Seúl |
Por cierto, en China puede haber problemas con aplicaciones de Google y otras, pero esperamos poder publicar gracias a la VPN que nos hemos instalado.
Datos prácticos:
Entrada al valle Mureung y templo: 2000 won (1,61€)
Entrada a las cuevas de Chengdok: 3000 won (2,41€)
Autobús desde Donghae al parque Samhwasa: 1300 won (1,04€); línea 12-4.
Daejoo Hotel en Donghae: habitación grande, casi suite. Muy limpio. Muy amables. El último día incluso nos llevaron en coche hasta la terminal de autobuses (debieron pensar que era más fácil esto que explicarnos qué autobus tomar). Al lado hay un hospital (nada de ruido de ambulancias), pero llamaba la atención ver a los pacientes por la calle salir con el carrito del suero a fumarse un cigarrito o tomarse algo en el 7eleven de enfrente...
Narita U-City Hotel: en Narita (Japón), a 30 minutos del aeropuerto. Tienen shuttle gratuito desde y al aeropuerto. Lavadora con detergente y secadora gratuitas en la planta baja. Habitaciones algo más amplias que en otros hoteles de Japón.
Sobre los autobuses de Donghae: en ninguna parada encontraréis un plano de la ciudad detallado con los recorridos de los autobuses, ni en inglés claro, aunque en todas veréis "el mapa", que es omnipresente por toda la ciudad, guías turísticas, estaciones de tren...deben pensar que les quedó muy bien, pero la verdad es que no es muy práctico y menos aún, detallado. Os decíamos que los autobuses tienen una frecuencia muy baja, con tramos de 20-30 minutos sin que pase ninguno. Algo que nos ha sorprendido en esta ciudad en comparación con las otras de Corea.
Espectaculares las fotos!!! Buen viaje a China. Ya nos descubriréis aspectos nuevos de esta gran cultura. Me ha encantado Korea del Sur
ResponderEliminarGracias Pili. Por lo de las fotos y por los ánimos para China. Que te adelanto que nos está gustando y sorprendiendo. Otra vez rompiendo estereotipos estamos. Ya verás.
EliminarEspectaculares las fotos!!! Buen viaje a China. Ya nos descubriréis aspectos nuevos de esta gran cultura. Me ha encantado Korea del Sur
ResponderEliminarPróximo destino Corea del Sur. Mola
ResponderEliminarMaría. No lo dudes. País maravilloso. Gente encantadora. Precio asequible y razonable.
EliminarBesos
Me ha encantado Korea del Sur, vais "in crecendo" Buen viaje a China....
ResponderEliminarGracias Rosi. Korea nos ha encantado ciertamente. Y vemos que es compartido. China es otra realidad pero te adelantamos que también nos está sorprendiendo.
EliminarBesos
Chicos, que ritmo lleváis...no sólo nos comentáis lo que está bajo el cielo sino también bajo tierra...Eso si, con colores a los que son tan aficionados por ahí...Y aún más en China ...seguimos enganchados...
ResponderEliminarQue la fuerza os acompañe!!!
Hola José. Bueno. Es que la montaña en cuestión estaba llenita de estatuas en la roca. Que devoción tienen por aquí a sus budas y sus dioses. Aprovecho para decirte que no se ve en las fotos pero les dejan monedas en cualquier recoveco de la estatua como,tengan oportunidad, así que entre el donativo que echan ante cada estatua y lo que luego dan para comprar los inciensos o los papeles para las ofrendas, cuando no les dejan directamente productos del supermercado o,fruta encima del altar...vamos que los monjes de hambre no se mueren.
EliminarUn abrazo desde China ya.
Creo que de lo visto hasta ahora, en vuestras fotos y crónicas, es de lo más bonito, no solo por los edificios y cultura tan diferentes si no también por la simplicidad y gusto en las decoraciones.
ResponderEliminarLas cascadas y el río que las forman espectaculares, salvando las distancias me recuerdan a esas gargantas de Gredos con sus pozas para darse un buen chapuzón y refrescarse.
Besos y buena excursión en la siguiente etapa, pues cuando veais este comentario ya llevaréis un tiempo por allí.
A nosotros también nos recordaba a Gredos, Paco. Incluso hubo algún momento que nos recordaba al "no, papá, si yo se saltar" de nuestra infancia ;-)
ResponderEliminarY comentamos que seguro que te gustaría habernos acompañado en esta etapa.
Besos