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Marsella en 1 día

Marsella, Puerto Viejo con Basílica Notre Dame al fondo

Hablar de Marsella es hablar de uno de los puertos mediterráneos más antiguos y el más activo en el Mediterráneo aún hoy en día. Es alrededor de ese puerto, del puerto antiguo, del Vieux-Port, donde se concentra la vida de la ciudad y de los lugares de interés. Y todo ello dominado por la siempre estilizada silueta de la Basílica de la Notre-Dame de la Garde.

Marsella hunde su origen en la época prehistórica, como atestiguan los restos encontrados, pero se puede considerar que fue oficialmente fundada en el 2600 a. C. por los griegos de Focea, quienes la retuvieron hasta ser conquistada por las legiones romanas de Julio Cesar. Con la llegada del Cristianismo, los visigodos fueron sus dueños y después, las distintas dinastías francesas. Todas estas culturas han ido dejando diferentes vestigios en sus calles como vamos a ver en un momento.

Basílica de Notre-Dame de Garde


Marsella, Basílica de Notre-Dame de Garde

Lo primero es la imponente Basílica de Notre-Dame de Garde, o como ellos la llaman, la “Buena Madre”. Para llegar hasta la cima de la colina que domina toda la ciudad a 162 metros de altura, subimos en el autobús 60, que parte desde la explanada del Puerto Viejo. El trayecto es, de por sí impactante, porque en algunos momentos el autobús tiene que subir por calles con una inclinación de más del 15%. También se puede subir en ascensor funicular. Por su posición destacada, en este lugar, el rey de Francia Francisco I edificó en 1536 la Fortaleza-castillo de la ciudad, cuyas ruinas aún son visibles, que permitió a Francia resistir los embates de Carlos I de España hasta la edificación de los baluartes en la zona inferior del puerto, momento en que esta zona pasó a reafirmar su parte religiosa y completar la construcción de la actual Basílica.

Es una iglesia de estilo románico-bizantino. Se puede visitar la cripta, medio excavada en la roca y el interior de la Iglesia, construida en la parte superior con mármoles blancos y verdes. Su interior está ricamente decorado con dorados y unos espectaculares mosaicos.


Basílica de Notre-Dame de Garde, mosaicos interior


Desde lo alto, las vistas de la ciudad y la bahía son inmejorables. También se puede observar el Castillo de If, en una pequeña isla del archipiélago de Frioul, frente a las costas de Marsella. En ese Castillo, que fue prisión y fortaleza, es donde Edmundo Dantés fue encarcelado en la novela
“El Conde de Montecristo”, de Alejandro Dumás

Marsellas, vistas desde la Basílica

Marsellas, vistas desde la Basílica

Marsellas, Castillo de If
Castillo de If

Catedral Santa María la Mayor


En la zona baja de la ciudad, junto al Puerto Viejo, está la Catedral Santa Maria La Mayor. Es una iglesia también de estilo bizantino construida en la segunda mitad de siglo XIX sobre los restos de diversas construcciones anteriores de la Catedral, que ya existían desde el siglo V.

Marsella, Catedral Santa María la Mayor


Barrio de Le Panier


El aledaño Barrio de Le Panier es uno de los más típicos de Marsella, aunque también uno de los más abandonados hasta hace poco, en que se ha llenado de coquetas terrazas y tiendas de artesanos y en donde encontraréis entre estrechas y empinadas calles la “Vieille Charité”, un edificio del siglo XVII para acoger huérfanos y mendigos. Hasta la parte alta de este barrio nos acercamos en el tranvía, bajándonos en la parada Place Sardi Carnot.

Marsella, edificio Puerto Viejo
Edificio en el Puerto Viejo de Marsella

Fuerte de St. Jean


Desde la parte baja del barrio de Le Panier, junto al mar cerca de la Catedral, se encuentra el fuerte de St. Jean que forma parte del Museo de las Civilizaciones y Europa. Este fuerte fue construido en el siglo XII por los Monjes Hospitalarios (la futura Orden de Malta), reconstruido en el siglo XV tras un saqueo de la flota aragonesa y reforzado en el siglo XVII. Destaca la imponente Torre de Renato I. Durante la Segunda Guerra Mundial, los alemanes instalaron en este fuerte uno de sus principales baluartes por lo que, en 1944, en el combate con las fuerzas aliadas, sufrió una fuerte explosión que prácticamente destruyó la Fortaleza.


Fuerte de St. Nicolas


Frente al fuerte St. Jean, al otro lado de la Bocana, se ubica el fuerte de St. Nicolas. Es un fuerte de tipo estrella construido bajo mandato de Luis XIV para proteger el puerto convirtiéndolo en uno de los más seguros de Europa en su época. Curiosamente, nunca llegó a usarse con fines militares. Se puede cruzar en un ferry boat o a pie desde el Puerto Viejo.

Marsella, Fuerte de San Nicolás


Puerto Viejo de Marsella


Os recomendamos callejear por las pequeñas callejuelas del Puerto Viejo. Hay muchas tabernas donde tomar el célebre “pastis” como aperitivo antes de unos buenos mariscos, célebres en la zona, una bouillabaisse de pescado, tapenade o, incluso, pescadito frito. Y después, en una de las muchas cafeterías terminar con un intenso café con una “navette”, que es el dulce típico de la ciudad, para descansar en las calurosas tardes de verano. Es un buen sitio para cenar también o tomar unas copas en un ambiente muy animado al caer la tarde-noche. Entre las calles se pueden encontrar también pescaderías, fruterías y otras tiendas tradicionales.

Marsella, espejo en el Puerto Viejo
Práctica marquesina para esperar los barcos a la sombra. En su espejo todos nos hacemos fotos

En esta zona podréis entrar a comer algo o tomar un café al Bar de la Marine, en el mismo puerto, al que nosotros entramos por casualidad y descubrimos en una fotografía que tenían que se trataba del restaurante donde Colin Flirt (Jamie) se declara a Ana Lúcia Moniz (Aurelia) en la película “Love Actually”. Aunque por la magia del montaje en la película parece que está en un pueblo portugués, resulta que está en Marsella. Aparte de la anécdota, comimos bien allí.

Marsella, Bar de la Marine escena Love Actually


Palais LongChamps


Alejándonos del área del puerto, en la zona de expansión de la ciudad en el siglo XIX con el Nuevo Imperio, se encuentra otro lugar interesante: el Palais LongChamps. Este edificio fue construido en 1869 para celebrar la llegada de agua potable con el canal de agua del río Durance a Marsella, por lo que denominó también Palacio del Agua. Su estilo neoclásico recuerda al edificio de Trocadero en Paris o al de Vittorio Emmanuelle de Roma, aunque mucho más pequeño. El edificio tiene unas bonitas fuentes con un precioso jardín, tanto en la parte frontal como en la posterior, y sus dependencias han sido ocupadas por el Museo de Historia Natural en el ala norte, con el impresionante Mamut siberiano disecado, y el Museo de Bellas Artes, en el ala sur. Una vez visto el palacio, es interesante volver al centro por la avenida LongChamps, disfrutando de los edificios del siglo XIX. Se llega en el metro Línea 1 en la estación CinqAvenues o en el tranvía bajando en la parada LongChamps.

Marsella, Palais LongChamps


Mapa de Marsella


Mapa de Marsella


No teníamos muchas expectativas para esta visita a Marsella y, sin embargo, estuvimos muy a gusto aquí. Una ciudad con bonitos rincones, tranquila y paseable.
¿Qué os ha parecido a vosotros?

Desde aquí nos dirigimos a Vence y visitamos el pequeño pueblo lleno de artistas de Saint Paul de Vence.

Otros sitios de interés que ver en un día en Marsella:

  • Hotel de Ville. Pequeño edificio del siglo XVII cercano al Puerto Viejo, que sobrevivió a la destrucción en la Segunda Guerra Mundial. Construido al estilo de los palacios genoveses es una obra de arquitectura barroca provenzal.
  • Abadía de San Víctor. Al extremo de la bocana, muy cerca del Fuerte de St. Nicolás, se encuentra este imponente edificio de aspecto más de castillo que de abadía, construido en el siglo V sobre lo que se dice era la tumba de San Víctor. Se puede llegará dando un agradable paseo desde el Puerto Viejo.
  • Cité Le Corbusier. El edificio fue construido en 1954 y se puede visitar y en su terraza está un museo.
  • Palacio del Faro, un hermoso edificio sobre una colina dominando el Puerto Viejo, construido para la Emperatriz Eugenia de Montijo. Hoy es El Palacio de Congresos de Marsella.
  • Calanque de Sormiou. Al este de Marsella se abren los Calanques, Impresionante calas con playas de agua cristalina y arena blanca rodeadas de murallas de roca y pinos. Hay autobuses para acercarse hasta Sormiou, pero en verano hay que andar entre 45 y 60 minutos por un desnivel importante para llegar a una de las calas más bonitas de la Costa Azul. Como no hay mucha sombra, es conveniente llevar suficiente agua y sombrero para protegerse del calor, sobre todo en verano. Durante el resto del año se puede acceder en coche hasta casi el borde de la playa de Sormiou, donde existe un pequeño aparcamiento de pago.


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Datos prácticos de Marsella:


Cómo llegar a Marsella:


Marsella está perfectamente conectada por avión, barco, tren o carretera.
El aeropuerto se encuentra a 25 km del centro y, desde allí, al centro por la carretera N-113. Hay autobuses desde el aeropuerto a la ciudad (realmente a la estación de tren y que tarda entre 20 y 30 minutos) pero, si quieres un coche de alquiler, las compañías de renting están en la planta baja de la sala 4.
Por tren, el TGV une Marsella con Paris en 3 horas, con parada en l aeropuerto de Paris-Charles De Gaulle.
Por coche, desde España (Barcelona) solo hay 515 kms.
Por mar, hay ferris de varias compañías que permiten llegar a los principales ciudades del Mediterráneo, pudiendo llevar tu propio coche con un trayecto cómodo, aunque nosotros no optamos por ellos por las críticas negativas que vimos de los que partían desde España. Los ferris de Córsica o la SNCM permiten llegar desde Marsella a Córcega, Liguria, la Toscana, o Cerdeña, por ejemplo.

Moverse en Marsella. La red RTM:


El tráfico es bastante caótico y aparcar imposible, salvo en los caros aparcamientos por lo que lo mejor es el transporte público unificado gestionado por RTM: dos líneas de metro, dos de tranvía y 74 de autobús.
Los títulos de transporte te permiten viajar en la red integrada durante una hora haciendo los transbordos que necesites. Se venden en los cajeros de Metro y Tranvía (ojo: NO en los autobuses), en los vendedores autorizados de RTM y en los puntos de venta de la RTM en Saint Charles y en el Espace Clients Bourse.
El coste de la tarjeta es 14€ para 10 viajes y de 1,70€ si solo quieres un solo viaje individual.
En su web puedes encontrar más información y un planificador de rutas.

Cuánto cuesta ver los monumentos de Marsella:

  • Basílica de Notre-Dame de Garde: entrada gratuita.
  • Catedral: gratuita la zona reservada al culto, y el resto solo se puede ver con visitas guiadas de la Oficina de Turismo.
  • Palais Long-Champ: El exterior y los jardines es gratuito.
  • Museo Bellas Artes: 5€ y domingo gratis.
  • Museo de Historia Natural: 5€ y domingo gratis
  • Ayuntamiento: entrada gratuita, pero si quieres una visita guiada deberás reservarla.
  • Abadía de San Víctor: 2€ para ver la cripta. La iglesia es gratuita.
  • Palais du Pharo: es gratuito en el exterior y dentro dependiendo de los eventos que se estén realizando, se puede o no entrar de modo gratuito.
  • Hay visitas guiadas por la ciudad que se pueden contratar en la oficina de información turística.


Horario de los Monumentos de Marsella:


El horario de invierno es de 09:00 a 18:00h, ampliándose en meses cálidos, llegando hasta las 20h en julio y agosto.
Horario de la Catedral (para el culto): de 08:30 a 20:00
Horario de los museos del Palais LongChamps es de 10:00 a 18:00.
Horario de la cripta de San Víctor abre los sábados desde las 09:00

Información turística de Marsella:


Ver su web: http://www.marseille-tourisme.com/es/

Dónde dormir en Marsella:


Novotel Suites Marseille Centre Euromed. En la zona nueva de Marsella pero muy bien comunicado con el centro con un tranvía eléctrico justo en la puerta. Genial para moverse por Marsella sin coche, ya que tiene aparcamiento para poder tener la libertad de usarlo para hacer excursiones. Las habitaciones muy amplias, con baño en formato de camarotes de barco. Contábamos con microondas y frigorífico, lo que te da libertad de hacer pequeñas comidas. Repetiríamos sin dudar.




4 comentarios :

  1. Yo fui hace un montón de años y el recuerdo que tengo es de una ciudad típica de puerto y bastante fea, pero al leer vuestra entrada me he quedado impresionada, o ha cambiado mucho o nosotros no supimos ver sus encantos.
    Tendremos que volver para cambiar de opinión.

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    Respuestas
    1. Quizá fue porque no teníamos altas expectativas. La mayoría de la gente nos había dicho lo que tú. Sin embargo, nos resultó tranquila y paseable. Probamos el pastis por primera vez y cenamos una rica boullabesa en una terraza del puerto viejo, ...

      Mismo sitio, ¡diferentes recuerdos!

      Eliminar
  2. Si no montas en taxis tuneados no habéis conocido lo más popular de Marsella https://www.youtube.com/watch?v=UhNXN736ee0

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