Días 13 a 16 de julio
Nairobi es una de las principales ciudades en África como lo demuestra el hecho de que las Naciones Unidas tienen aquí una de sus tres sedes en el mundo. Su aspecto
a primera vista es un poco caótico a nuestros ojos europeos, con calles abarrotadas de coches, ciclistas, autobuses y "matatus". Aunque en cierto modo este
caos es similar al que vimos hace años en El Cairo. Pese a su
fama de ciudad peligrosa (Nairobery), por lo que hemos visto no es más peligrosa de otras zonas en grandes ciudades.
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Cataratas Victoria desde el avión |
Salimos de
Livingstone con destino Nairobi sin contratiempos y al poco de iniciar el vuelo, vimos a lo lejos las
Cataratas Victoria.
Desde el aire se aprecia perfectamente su estructura y más si, como en nuestro caso, el piloto tiene la atención de sobrevolarlas en círculo bastante cerca para que los pasajeros disfrutemos de esta maravilla antes de dejar Zambia. Esto nos pasó igual hace un tiempo al llegar a
Iguazú. Se aprecia perfectamente
un río ancho que, de pronto, desaparece en una profunda grieta. ¿Dónde ha ido? En el fondo de la garganta está la respuesta, girando en el Boiling Point y pasando bajo el puente de hierro. Impresionante. Teníamos asientos G y J, quizá os sea útil cuando vayáis.
Ya en Nairobi, casi a las diez de la noche,
los trámites de inmigración fueron muy rápidos. Le dijimos al agente que teníamos intención de entrar en Tanzania y regresar a Kenia y nos informó de que
no era necesario visado múltiple en ese caso, ya que
cuando re-entras en Kenia desde un país vecino, no cuenta como otra entrada. ¡Bien!. En vez de 80$ por persona, pagamos 50$ cada uno. En efectivo, eso sí. El taxi que habíamos solicitado al hotel debido a la hora de llegada nos estaba esperando puntual. Fueron alrededor de 30 minutos lo que tardamos en llegar a nuestro nuevo alojamiento: Vine Homes International. Dejadnos un momento que os contemos sobre este sitio antes de pasar a Nairobi en el siguiente párrafo. Está en una calle tranquila, rodeada de escuelas y con un centro comercial a pocos pasos (Yaya Mall). En esta zona se puede andar por la calle con mucha seguridad aunque, curiosamente, las casas están rodeadas de muros con alambres de espino o de concertina y tienen puertas de acceso vigiladas. En nuestro caso, tenemos que pasar una puerta de hierro vigilada las 24 horas, y después ir a la casa 2, de las 9 que hay. Nuestra casa también tiene otra puerta de hierro que sólo está abierta durante el día. Sólo hay que llamar y vendrá Dickens, el encargado keniano, a abrirte.
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Puesto de cerámica en Arkwings Kodhek Road |
Hemos dicho casa y así nos sentimos, ya que estamos muy cómodos aquí. Podemos usar la cocina, tenemos tendedero en el jardín y, sobre todo, el resto de compañeros de casa y el ya mencionado Dickens, nos hicieron sentir bien desde el primer momento. Estaremos aquí 5 días, bueno, 6 días en realidad porque hemos de esperar un día más para hacer el tan deseado
safari en Masai Mara. Compartimos casa con Renée, de Colorado, que está haciendo una investigación; con Matheu, de Manchester, estudiando un doctorado; y con Srinivasan, del sur de la India, visitando clientes. Los tres son vegetarianos. Dickens es un joven keniano que está al cargo de la casa. Siempre tiene una sonrisa en la cara y se preocupa de que estemos cómodos. Nos hace unos desayunos muy ricos todos los días, no faltando nunca la fruta fresca. Su te keniano con jengibre les encanta a nuestros compañeros de piso. Además, está el dueño de la casa, Peter, que está en su oficina unas horas al día. Ya os hablaremos de los “tratos” que hemos hecho con él.
Revisión 21 de julio: ver entrada "Timados en Nairobi"
Y como vemos que nos enrollamos mucho, vamos al grano. En Kenia queríamos ir a Masai Mara, donde ya ha empezado la gran migración y este es un espectáculo que no queremos perdernos. También queríamos ir a Samburu, que está al norte, o a Amboseli, al sur, cerca de Tanzania. Mientras esperamos encontrar buenas ofertas, estamos
visitando Nairobi.
Visita al David Sheldrick Elephants Orphanate
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Alimentando al bebé elefante |
Nuestra primera visita ha sido el
orfanato de elefantes, el David Sheldrick Elephants Orphanate. Simplificando mucho, digamos que es una guardería para elefantes y rinocerontes que son encontrados en los diferentes parques de Kenia cuando tienen poco tiempo de vida y cuya madre ha muerto, bien en algunos casos de muerte natural (lo que incluye heridas de un ataque de depredadores), bien por ser asignadas por
furtivos en la mayoría de los casos. En este centro, que forma parte de una fundación, los curan si están heridos, les alimentan, les unen a grupos de elefantes donde creen que por carácter pueden desarrollar mejores relaciones y, en definitiva,
les sacan adelante hasta que cumplen unos 2 años y medio, momento en el que les dejan en libertad para ser adoptados de modo natural por familias de elefantes en libertad.
Previamente les han acostumbrado a estar con estas manadas salvajes de vez en cuando, para testar con qué manada tendrán mejores relaciones en el futuro y para que se acostumbren a estar con sus congéneres en libertad.
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También les gustan las ramas |
Los elefantes y sus cuidadores establecen estrechas relaciones. Los cuidadores conocen cada detalle de la vida de sus “chicos”, cada uno tiene su nombre y cuando vas a verlos te explican su procedencia y las circunstancias en que fueron encontrados.
Al orfanato vienen los colegios con los niños pequeños para que aprendan sobre los elefantes y también,
para sensibilizarlos acerca del daño que hace la caza furtiva y la necesidad de preservar la vida animal en los pocos reductos que quedan.
Sólo se les puede ver una vez al día, de 11am a 12am. Esa es la hora de darles el biberón. Cuando llegamos estaban dándoles hojas y ramas jóvenes y luego les dieron los biberones.
Toman la misma leche artificial que muchos niños, ya que la leche de otros animales les sienta mal.
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Facóqueros |
Antes de irnos nos fijamos en un
grupo de facóqueros, esos pequeños animales similares a jabalíes a los que conoceréis seguro por Pumba, el simpático facóquero de El Rey León.
Dando de comer a las Jirafas en el Girafe Centre
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Girafe Centre |
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Jirafa de Rostchild |
Después nos acercamos al
Centro de Jirafas (Girafe Centre) donde se tiene la oportunidad de
alimentar a un grupo de jirafas desde una plataforma situada a la altura de sus cabezas por lo que, aunque es una pequeña turistada, te permite mirar a los ojos a una jirafa y distinguir multitud de pequeños detalles tanto en su cabeza como en el resto de su cuerpo. Las jirafas que tenían aquí eran todas del tipo
Jirafa de Rostchild, que tiene las patas sin manchas debajo de las rodillas y su pelaje en forma de grandes manchas ordenadas, como si fueran ladrillos. Es
similar a la Jirafa Reticular, pero esta última tiene también manchas en las patas. El otro tipo de jirafa que esperamos ver cuando vayamos a Mara es la
Jirafa Masai.
Karen Blixen Museum. La casa de Memorias de África
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Karen Blixen Museum |
Desde aquí, no muy lejos, nos acercamos a ver la
casa museo de Karen Blixen, una pionera danesa en las plantaciones de te en Kenya, famosa por el libro que escribió, en el que se basa la película
"Memorias de África".
Museo Nacional de Kenya
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Sala de los mamíferos |
Hoy, sin embargo, hemos hecho un recorrido más urbano. Queríamos visitar el
Mercado Masai que todos los sábados se ubica en uno de las zonas abiertas del centro junto al Palacio de la Judicatura (The Judiciary) y el monumento "Kenyatta Statue". Nos hemos acercado en autobús junto a otros dos huéspedes de la casa, Renée y Claudia (recién llegada de Chile), pero como este fin de semana hay una convención de la ONU muy cerca, lo han cancelado, por lo que al llegar hemos decidido ir caminando unos 20 minutos hasta el
Museo Nacional de Kenya, donde hemos podido ver una colección de restos de hominidos encontrados en Kenya, incluido el esqueleto casi completo del
"Turkana Boy", un homo erectus de hace casi 1,5 millones de años. Tiene además una colección de aves, mamíferos y, claro, diferentes utensilios, vestidos y explicaciones sobre la cultura keniana.
A la salida, hemos pasado al
Snake Park, pensando que sería más un zoo que lo que realmente es: un pequeño terrario con serpientes, algunas tortugas, algunos peces y dos cocodrilos. Nada del otro mundo. Aunque los varios
colegios que estaban realizando las visitas al museo y a este parque de serpientes estaban disfrutando muchísimo, tanto con estos animales como con los cuatro "hombres blancos" que estaban deambulando por allí y a los que han sacado tantas fotos como a los otros animales, solo que nosotros hemos posado 😎.
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Escolares en el Museo Nacional |
Tras este
agradable paseo por Nairobi, hemos vuelto en un "matatu" a la casa.
El matatu es como una pequeña furgoneta para 12 personas que va parando en las mismas paradas de los autobuses grandes pero que, al ser más pequeño, se mueve con más rapidez por las calles y atascos, incluso subiéndose a las aceras. Es más barato y, como en los autobuses, tiene una
música disco atronadora en su interior. Cobra una persona que va abriendo la puerta y haciendo subir y bajar a la gente, incluso en movimiento.
Es el medio de transporte más popular en Kenya, y es similar a los combis que usamos en
Zambia y
Bostwana. Una experiencia que os aconsejamos.
Podéis ver el video de estas visitas, junto con la del
Parque Nacional de Nairobi y del
Parque Nacional de Masai Mara en nuestro canal de
YouTube.
Datos prácticos para moverse en Nairobi:
Taxi del aeropuerto al hotel: 25$ (22,50€)
Coste medio autobús local: 30 chelines (0,27€)
Coste medio matatu: 20 chelines (0,18€)
Entrada al orfanato de elefantes: 500 chelines (4,48€)
Entrada al centro de jirafas: 1000 chelines (8,95€)
Entrada al Museo Nacional de Nairobi: 1200 chelines (10,74€)
Entrada al Snake Park: 1200 chelines
Entrada combinada Museo y Snake Park: 1500 chelines (13,43€)
No os recomendamos el hotel, ya que tuvimos una mala experiencia allí.
idea para la vuelta: montar un matatu por la Castellana, jeje
ResponderEliminarJajajaja, al ayuntamiento le va a encantar..
EliminarY a la Comunidad ni te cuento!
Que interesante relato, espero con impaciencia el siguiente.
ResponderEliminarMuchos besos
Gracias,Rosi.
EliminarSi esta entrada te ha gustado, la que acabamos de publicar del Parque Nacional de Nairobi te va a encantar.
Besos
Oye, pues lo del "matatu" en la Castellana no es mala idea, sobre todo por la noche donde no encuentras taxi, pero revisando el coste por viaje !
ResponderEliminarHa sido muy ameno leer los relatos de estos últimos días, es casi como estar allí, pero salvándonos de los "regateos" con los taxistas y agencias de aventuras :-).
Es todo un arte esto del regateo y los kenianos tienen mucha escuela
Eliminar;-)
Qué experiencia, eso de ser tan diferente en un sitio como para que los lugareños te hagan fotos!!!!
ResponderEliminarEs cierto, Alicia, pero lo raro es que no somos muy diferentes de los millones de turistas que vienen cada año. De todos modos, aquí los niños son muy educados, obedecen a sus maestros y mayores sin rechistar y siempre te saludan con una sonrisa.
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